Ania
Ania Labeguerie y yo nos conocimos haciendo la formación de profesores de yoga en la escuela Sadhana en San Sebastián.
Hasta entonces, Ania había recibido cursos de Hatha yoga en Burdeos y había empezado a tener una práctica regular de yoga con la ayuda de libros. Realizamos juntas la formación como profesoras de yoga.
En 2009, creamos la asociación Mudrasana Yoga para continuar con las clases de yoga de la asociación Samtosha en Hendaya y aquí comenzó a dar clases.
En paralelo, su búsqueda espiritual le llevó a estudiar la meditación, el Budismo y el Vedanta.
Su amor por el yoga nos lo transmitió a todos, alumnos y profesores con sus actos cotidianos, el estudio y su práctica.
La vida quiso que se fuera un 21 de mayo día de Wesak (el día de la iluminación de Buda) pero su esencia, su alegría y su recuerdo siempre seguirán en Mudrasana.
Un pequeño extracto de lo que ella decía :
“Como quiera que le queramos llamar (Hatha Yoga o Viniyoga u otro…) el Yoga postural aporta muchísimos beneficios para nuestra salud y nuestro equilibrio psycho-energético, poder enseñar esto es maravilloso. Es algo que me estimula en mi búsqueda y mi practica. Me gusta poder compartir este espacio de relajación y meditación, un espacio donde uno se puede recargar, encontrarse consigo mismo y también en buena compañía…Un espacio donde uno puede conectarse a esta fuente de paz y harmonía que siempre está ahí, disponible, pero que olvidamos en nuestra vida cotidiana.”
NAMASTÉ